Capturados por amor, lealtad… y órdenes de captura 

Lo que parecía una simple diligencia terminó como una escena sacada de una serie criminal. Tres personas, unidas por lazos afectivos y delictivos, fueron detenidas en menos de 24 horas, todos con órdenes de captura vigentes.

Según información oficial de la Policía Nacional Civil (PNC), el primer arresto se realizó en la colonia Atlántida, zona 18 capitalina. Allí fue detenido Josué Cáceres, alias “Dany”, de 30 años, presunto cabecilla de extorsionistas del Barrio 18. Las autoridades confirmaron que enfrentaba dos órdenes de captura por asociación ilícita, extorsión y exacciones intimidatorias en forma continuada.

Horas después, su conviviente, Rosy Angélica Hernández, llegó a la Torre de Tribunales exigiendo respuestas y reclamando las pertenencias de su pareja. Pero al verificar sus datos en el sistema, los agentes descubrieron que también tenía una orden de captura por los mismos delitos.

Por si fuera poco, Carlos Alberto Cox Luna, quien acompañaba a Rosy, también fue identificado. Su intención era ayudar a la pareja, pero la PNC confirmó que tenía orden de aprehensión por traslado ilegal de armas de fuego y un historial de cuatro antecedentes penales: robo, atentado y portación ilegal de armas hechizas.

Tres personas, tres capturas, una sola historia: delincuencia, vínculos personales y justicia. Todos fueron puestos a disposición judicial. Una historia donde el amor y la amistad no resistieron los filtros de la ley.

Los tres enfrentarán un juicio penal que determinará su culpabilidad y las penas correspondientes. Permanecerán en prisión preventiva mientras esperan el juicio, y en el caso de que sean declarados culpables, podrían pasar varios años en prisión.

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